jueves, 3 de febrero de 2011

El despertar al mundo


Me complace reencontrarme en este Blog, escribiendo otra vez, después de una larga ausencia por “falta de tiempo”.
No puede ser más emotivo regresar a plasmar unas líneas en esta entrada, con un hallazgo que ocupa por estos días los medios, aunque no demasiado, hay que decirlo. Es sobre el tema del “Descubrimiento de una nueva tribu o grupos de personas cuyo despertar al mundo se realiza desde un enfoque que sobrepasa lo terrenal para estas creaturas del señor, que aún no conocen de nuestras altas tecnologías, enfermedades y desventuras de un mundo que complacientemente llamamos civilizado”.
¿Os podéis imaginar lo que significaría ver un avioneta para estas gentes? Que inclusive, ante el instinto nato de supervivencia, apuntaban sorprendidos y desafiantes, con lanzas, arcos y flechas hacia su observador ruidoso, que les contemplaba desde lo alto del cielo, en pleno corazón de la selva amazónica, entre prácticamente pasada la frontera de Perú y Brasil, en territorio brasileño.
Estos "indígenas" lo conforman grupos reducidos de 10 a 20 personas, entre niños, hombres, mujeres y ancianos.
¿Pero cuál es el motivo real de su hallazgo? Han sido descubiertos por la Fundación Nacional del Indio de Brasil- FUNAI, quienes han encontrado este pequeño poblado de indígenas sobrevolando la zona.
Desde esta organización denuncian lo que realmente está pasando en la región, a las que se suma la de organizaciones no gubernamentales (ONG) tan influyentes como Survival Internacional. Hay razones más que fundadas, que estan "obligando la peregrinación de estas tribus" , ocasionadas por motivos muy preocupantes, como un desenfrenado y acelerado "crimen contra la naturaleza", con trasfondos ilegales y económicos. Un testimonio más de nuestra propia irracionalidad, de lo que con tanto orgullo llamamos "civilización".
Al parecer estas personas son índigenas peruanos, que ante la destrucción masiva a cargo madereros ilegales en la selva peruana, de la cual el gobierno peruano ha declarado "la no existencia de estas personas" y con la consecuente falta de protección gubernamental en la zona, han desencadenado, que estos indígenas busquen un habitat seguro para poder sobrevivir. Ellos no entienden de fronteras, pero si de tierra, aquella que les da de comer, aquella que les da la vida, un territorio que seguramente su posesión traspasa muchas generaciones, y que ahora se dan a conocer para asombro de algunos, en circunstancia no apropiadas, que para nada ayudan a la vida "normal" que merecen, sin la precencia del hombre civilizado.
La deforestación que vive la zona actualmente, es totalmente descontralada por un gobierno que no quiere ver ni reconocer absolutamente nada, dejando que mucha gente sin escrúpulos se enriquezca a sus anchas. ¿Quién es el comprador o compradores de esa madera? ¿Qué negocios y poder se juega en la región?
Cada vez es más evidente que en lugares como Yurúa, Purús y Envira, en Perú, la tala descontrolada de árboles están agrabando no solamente la flora y fauna de la amazonía sino que ha llegado a mermar la existencia de seres humanos, como estas tribus que huyen del hombre moderno. Pero para su desgracia, siempre son encontrados.
Un dato aún más desconsolador, según Survival International, la mitad de las más de 100 tribus aisladas en el mundo, todas en peligro por enfermedades, asesinatos indiscriminados o expulsiones, se encuentran entre Brasil o Perú. “El mundo tiene que despertar y asegurarse de que sus tierras son protegidas de acuerdo a la ley internacional”, ha manifestado Stephen Corry, director de la ONG".

Y ante este panorama, hay que señalar que los recursos son limitados, y puede que cause conflictos por supervivencia, entre tribus "no contactadas" de Brasil, con las tribus nómadas peruanas que han cruzado la frontera, sin elección alguna, buscando un mundo, el suyo, el que cada ves es más difícil de encontrar, el que con enorme pasividad, todos vemos que lo estamos destruyendo.
Desde aquí hago un llamamiento personal a los gobernantes de Brasil y Perú, en especial al presidente peruano Alan García, quien tiene la responsabilidad moral de dirigir un país afortunado, de tener los recursos naturales que tiene, al igual que Brasil, no dejando agonizar a la amazonía, que forman un elevado porcentaje de vida y recursos, con áreas verdes importantes para todo el planeta. Que finalmente se tome medidas contra estos madederos ilegales, y que al fin se diga en voz alta "Basta a la deforestación amazónica".

No puedo creer, como reflexión final, que tanto nos cuesta entender, que el planeta es solamente uno, que los recursos son limitados, que estamos cambiando el curso normal de las cosas, que estamos matando flora y fauna, o descontrolando su desarrollo de manera indiscriminada, dejando sin nada, y hasta el límite de la extinción a ciertos seres humanos, que no son más que nosotros mismos, un espejo, tal vez, que no queremos ver. Una cruda realidad que solemos mirar "de costado" y cuyo final se comercia entre la ilegalidad, el poder y el dinero.
Es realmente vergonzozo y triste lo que está pasando y no hago más que preguntarme ¿Quiénes son los realmente civilizados? ¿Quiénes son los que dan el ejemplo de respeto al medio natural y su supervivencia?
Y si acaso, en medio de nuestra comodidad cotidiana, en el mundo moderno, la reflexión de algunos no son suficiente, o si en el camino de el "no involucrarse demasiado" es mejor la ignorancia, que aunque conciente, alimenta la ceguera total en la creencia de una vida infinitamente segura.
¿Quién, pues, debe despertar al mundo?


1 comentario:

Isabel dijo...

Es indignante la verdad lo que sucede con esta pobre gente. Muy interesante tu artículo, Susana.